jueves, 8 de julio de 2010

Será tu luz, será quien te abra el corazón de par en par..

Morena, ojos brillantes, postrada frente a mi tendiendome la mano. En la mesa una baraja de cartas, dos velas y un papel. Me miró a los ojos y me dijo:

- Confiame la lectura de tu futuro.

Me senté frente a ella, extendió su mano y agarró la mia. Me pidió que escribiera un nombre en el papel sobre la mesa, una vez escrito se lo entregué. Lo observó con paciencia y dirigió hacia mi una sonrrisa complice.
Me sentía inquieta, impaciente por saber que depararía mi futuro. También había un escalofrío recorriendo mi cuerpo que me hacía sentir miedo.
Aquella muchacha que decia ver mi futuro me contó sobre la aparición de una persona especial, alguien que daría luz a mi interior. Que apartir de un primer encuentro se formaría algo grande, un sentimiento incontrolable, que por más que quisiera evitarlo se quedaría clavado en mi pecho.
Que sería feliz, tendría ilusión, nuevas espectativas.. Pero sobretodo amor. Pasaría horas pensando y deseando a esa persona. Que habría cosas buenas tanto malas, más todo saldría bien en un final. 
Y no se equivocaba aquella joven al leerme las cartas, tal y como ella predijo sucedió.. 

"Fue aquella que tomó mi mano, me la leyó y me dijo hermano, a ella a la que tu le das el corazón no es para ti,entre cubos diferentes y murmurará la gente, sin saber que te esperaba al fin el verdadero amor..
Y verás lo que es tener a quien te quiera de verdad, no dudes más, lo que te digo se hará pronto realidad.
Será tu luz, será quien te abra el corazón de par en par. Es tiempo ya para olvidar, serás feliz ya lo verás.
Escucha ya, lo que la gente diga no te ha de importar.. "

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