Buscaba la felicidad en cada rincón, en cada palabra.. Pero no encontré felicidad, solo encontre la realidad.
Aveces piensas que siempre tendrás a alguien que te levante cuando caes. Más si lo miras con atención y claridad puedes ver que no es así, que estás solo ante el mundo y que has de saber levantarte por ti solo.
Que por mas veces que haya caido pocas me han ayudado.
Y es que las personas piensan unicamente en si mismas, más siempre reclaman tu ayuda ante una caida.
No sé cuanto tiempo más podré aguantar tales situaciones, tantas lágrimas y tantas desilusiones.
Pero al fin llega mi hora, reclamo con todas mis fuerzas oir "es martes, nos vamos". Entonces me iré y me alejaré por completo de esta absurda rutina que me ahoga.
Reflexionaré, dejaré la mente en blanco, disfrutaré.. Más sé que nada cambiará cuando vuelva, que seguiré dando demasiadas vueltas a mi cabeza, seguiré llorando sin consuelo y sintiendo dentro el
dolor..
No hay comentarios:
Publicar un comentario